Dijous, 14 d'agost de 2008
Noticias generales
El IPC amplía su escalada al 5,3%, sus máximos desde el año 1992
Expansión, 13 de agosto de 2008
El brusco parón en el ritmo de crecimiento todavía no logra frenar la escalada de los precios que sufre la economía española. Al cierre de julio, y una vez aplicada la subida de las tarifas eléctricas, el IPC aumentó en tasa interanual hasta el 5,3%, sus cotas más altas desde el año 1992.
Publicado el 13/08/2008, por Expansión.com
Los peores augurios se han confirmado con las cifras definitivas de inflación publicadas hoy por el INE. Las adelantadas ya elevaron el IPC armonizado hasta el 5,3%. Dos semanas después estas cifras han sido corroboradas.
A la espera de que el reciente pinchazo en los precios del petróleo se refleje al fin en las cifras del IPC, el rally alcista en los precios sigue sin tocar techo, y en julio la tasa interanual se elevó finalmente por encima del umbral del 5% registrado en junio, con una subida de tres décimas. Desde diciembre de 1992 no se alcanzaba el 5,3%, y desde junio de 1995 no se superaba la barrera del 5%.
El inicio de la temporada de rebajas, especialmente agresivas para hacer frente al bajón en el consumo, ha permitido al menos que la inflación bajara cinco décimas respecto a junio, como consecuencia de una bajada en un 11,3% de los precios del vestido y del calzado.
Donde siguen sin registrarse bajadas es en los precios del transporte y carburantes. Además, la aplicación de la subidas de las tarifas eléctricas tampoco ayudó precisamente a controlar los precios.
Las tensiones inflacionistas van más allá de los precios de los alimentos y de la energía. El IPC subyacente repuntó otras dos décimas en julio, para situarse en el 3,5%, muy por encima también de las previsiones iniciales de inflación fijadas por el Gobierno, y del objetivo límite establecido por el BCE, el 2%.
Gobierno El Ministerio de Economía atribuye esta subida del 5,3% básicamente a los carburantes. De hecho, señala en un comunicado que dos de las tres décimas de subida del IPC interanual de julio se deben al encarecimiento del 88% experimentado por el precio del petróleo en un año.
La otra décima de alza interanual se debe, según el Ministerio, al comportamiento de los elementos relacionados con el turismo, el transporte aéreo, los hoteles y los viajes organizados.
Los peores augurios se han confirmado con las cifras definitivas de inflación publicadas hoy por el INE. Las adelantadas ya elevaron el IPC armonizado hasta el 5,3%. Dos semanas después estas cifras han sido corroboradas.
A la espera de que el reciente pinchazo en los precios del petróleo se refleje al fin en las cifras del IPC, el rally alcista en los precios sigue sin tocar techo, y en julio la tasa interanual se elevó finalmente por encima del umbral del 5% registrado en junio, con una subida de tres décimas. Desde diciembre de 1992 no se alcanzaba el 5,3%, y desde junio de 1995 no se superaba la barrera del 5%.
El inicio de la temporada de rebajas, especialmente agresivas para hacer frente al bajón en el consumo, ha permitido al menos que la inflación bajara cinco décimas respecto a junio, como consecuencia de una bajada en un 11,3% de los precios del vestido y del calzado.
Donde siguen sin registrarse bajadas es en los precios del transporte y carburantes. Además, la aplicación de la subidas de las tarifas eléctricas tampoco ayudó precisamente a controlar los precios.
Las tensiones inflacionistas van más allá de los precios de los alimentos y de la energía. El IPC subyacente repuntó otras dos décimas en julio, para situarse en el 3,5%, muy por encima también de las previsiones iniciales de inflación fijadas por el Gobierno, y del objetivo límite establecido por el BCE, el 2%.
Gobierno El Ministerio de Economía atribuye esta subida del 5,3% básicamente a los carburantes. De hecho, señala en un comunicado que dos de las tres décimas de subida del IPC interanual de julio se deben al encarecimiento del 88% experimentado por el precio del petróleo en un año.
La otra décima de alza interanual se debe, según el Ministerio, al comportamiento de los elementos relacionados con el turismo, el transporte aéreo, los hoteles y los viajes organizados.
