Divendres, 13 d'agost de 2010
Noticias generales
La Seguridad Social aumenta un 26,6% la recaudación de deudas por vía ejecutiva hasta junio
Expansión, 13 de agosto de 2010
La Seguridad Social incrementó en el primer semestre del año un 26,6% la recaudación en vía ejecutiva hasta alcanzar los 815,4 millones de euros, según informó el Ministerio de Trabajo e Inmigración.
12.08.2010 Efe 0
La Seguridad Social incrementó en el primer semestre del año un 26,6% la recaudación en vía ejecutiva hasta alcanzar los 815,4 millones de euros, según informó el Ministerio de Trabajo e Inmigración.
En un comunicado, Trabajo informó de que ello es consecuencia de las medidas de prevención de la morosidad y el plan de lucha contra el fraude fiscal, laboral y a la Seguridad Social desarrollado por la propia Seguridad Social, la Agencia Tributaria y la Inspección de Trabajo.
De esos 815,4 millones, 177,4 millones son por aplazamientos; 305,08 millones por derivación de responsabilidades; 34,6 millones por embargo de devoluciones tributarias y 121,6 millones por embargo de cuentas corrientes.
El cobro de deudas en vía ejecutiva o de apremio se inicia una vez agotado el periodo voluntario establecido legalmente para hacer efectivo el abono de las cuotas y demás recursos de financiación de la Seguridad Social por quienes están obligados al pago.
Trabajo subrayó que tanto el dato de recaudación ejecutiva de 2010 como el del pasado año -1.452,8 millones de euros, el 19,3% más que en 2008- representan la cifra de recaudación por el procedimiento de apremio más alta desde la creación de las Unidades de Recaudación Ejecutiva de la Seguridad Social en 1988.
Asimismo, informó de que el aumento de la recaudación en vía ejecutiva se debe no sólo al incremento de la deuda susceptible de cobro, sino fundamentalmente al impulso que desde la Seguridad Social se ha dado al uso de medios telemáticos, así como a la intensificación de la colaboración con otras entidades públicas y privadas.
A este respecto, Trabajo destacó el Convenio de Colaboración entre la Tesorería General de la Seguridad Social y la Agencia Tributaria que mejora los convenios anteriores y permite el intercambio de información, lo que facilita que el importe recaudado por embargo de devoluciones tributarias hasta junio de 2010 ascienda a 34,6 millones de euros.
Además, en el primer semestre del año se practicaron 1.239.699 embargos, el 8,99% más que en el mismo periodo del pasado año.
Asimismo, durante los primeros seis meses de 2010 se analizaron 80.709 empresas, el 40% más, mientras que el número de empresas con primer descubierto que presentan deuda vigente fue de 1.357.
La Seguridad Social embargó más de 1,6 millones de cuentas en 2009
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12.08.2010 M. Tejo. Madrid 0
El cuerpo de la lucha antifraude de la Seguridad Social está más activo que nunca. El año pasado, el organismo público ingresó la cifra récord de 1.452 millones de euros por procedimientos de apremio, un 19,3% más respecto a la campaña de 2008.
Las nuevas tecnologías jugaron a su favor: gracias a un “complejo” cruce de ficheros con entidades financieras, pudo realizar 1.614.244 embargos de cuentas, lo que generó unos ingresos de 231,8 millones.
La estrecha relación de la Tesorería de la Seguridad Social con la banca –una de las novedades respecto a las actuaciones de ejercicios pasados– ha hecho posible que en sólo un año los ingresos por esta vía hayan crecido cerca de un 40%. Esta línea de trabajo se revela como una de las más importantes de cara a 2010. Tan sólo entre enero y mayo, las cuentas secuestradas han permitido aumentar los ingresos de la caja pública un 83%, hasta los 121,6 millones de euros. En 2006, la cifra apenas rozaba los 68 millones.
Pero el salto en la recaudación también se explica por la intensificación de las acciones para “derivar la responsabilidad por el pago de la deuda” a personas o empresas distintas de las inicialmente obligadas. Así, si una empresa está pendiente de cobrar facturas por parte de una segunda, la Seguridad Social le puede exigir a la compañía cliente que le redirija a ella las cantidades adeudadas.
El año pasado se emitieron 18.000 desviaciones, cinco mil más que hace un año, un cauce por el que se lograron recaudar 534 millones. Un procedimiento parecido es el que se usa en los embargos de devoluciones tributarias. En este caso, es el Fisco quien anula las cantidades que, por ejemplo, una persona iba a recibir de acuerdo a su Declaración de la Renta, para trasladar ese dinero a la Seguridad Social. Este método reembolsó a la Tesorería 91,4 millones, un 60% más que la campaña pasada.
Otra de las reglas que aplica la Seguridad Social para asegurar el cobro de la deuda es la adopción de medidas cautelares cuando existen “indicios racionales” de que el cobro se verá frustrado. Ante este escenario, el Estado puede confiscar propiedades a la supuesta empresa o particular morosos. Pues bien, el pasado año la Seguridad Social reforzó su prudencia y dictó 2.629 medidas cautelares, un 70% más.
En línea con estas operaciones, la Seguridad Social ha reforzado el control de medianas y grandes empresas para examinar su capacidad real de pago. Así, a 31 de mayo de 2010 había detectado 1.357 compañías con algún descubierto. La buena noticia, dice, es que el número de empresas que no pagan se sitúa en torno al 0,9%, cifra similar a otros años, pese a la crisis. También hay que destacar que el afán recaudatorio de la Seguridad Social permitió, no obstante, aplazar cuotas empresariales por valor de 287,2 millones, un 32% más.
Menos autónomos Parece que a la Seguridad Social no se le escapa ningún caso de morosidad, pero hay otros problemas para los que no ha encontrado una pócima curativa: la pérdida de afiliados y, por tanto, de ingresos. La sangría de destrucción de empleos afecta tanto a los trabajadores asalariados como a los que trabajan por cuenta propia.
De hecho, desde que comenzó la crisis el número de autónomos en España ha pasado de los 3.409.008 , en mayo de 2008, a los 3.143.001, en junio de 2010, lo que se traduce en 266.007 trabajadores por cuenta propia menos, un descenso del 7,8%. Esta lacra afecta a todas las comunidades, excepto a las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, según recordaba ayer la Federación ATA.
¿Pero qué impacto tienen estas pérdidas sobre las cuentas de la Seguridad Social? En un año en el que la destrucción de empleo ha dominado la estadística del mercado laboral, el balance no es nada positivo. Cabe recordar que los autónomos tradicionalmente han cotizado por la base mínima. Así, según cifras de Trabajo, el 83,5% de los microempresarios contabilizados en el verano pasado no superaban el suelo mínimo de cotización, un patrón de comportamiento que se presume en la actualidad.
Según este escenario, por cada empleo autónomo el organismo público deja de percibir 841 euros al mes, más de 10.000 euros al año. Así, en los dos años centrales de la crisis (2008 y 2009), la Seguridad Social se habría visto privada de unos 532 millones de euros, más del doble de lo que cuesta abonar los permisos de paternidad de un año.
La Seguridad Social incrementó en el primer semestre del año un 26,6% la recaudación en vía ejecutiva hasta alcanzar los 815,4 millones de euros, según informó el Ministerio de Trabajo e Inmigración.
En un comunicado, Trabajo informó de que ello es consecuencia de las medidas de prevención de la morosidad y el plan de lucha contra el fraude fiscal, laboral y a la Seguridad Social desarrollado por la propia Seguridad Social, la Agencia Tributaria y la Inspección de Trabajo.
De esos 815,4 millones, 177,4 millones son por aplazamientos; 305,08 millones por derivación de responsabilidades; 34,6 millones por embargo de devoluciones tributarias y 121,6 millones por embargo de cuentas corrientes.
El cobro de deudas en vía ejecutiva o de apremio se inicia una vez agotado el periodo voluntario establecido legalmente para hacer efectivo el abono de las cuotas y demás recursos de financiación de la Seguridad Social por quienes están obligados al pago.
Trabajo subrayó que tanto el dato de recaudación ejecutiva de 2010 como el del pasado año -1.452,8 millones de euros, el 19,3% más que en 2008- representan la cifra de recaudación por el procedimiento de apremio más alta desde la creación de las Unidades de Recaudación Ejecutiva de la Seguridad Social en 1988.
Asimismo, informó de que el aumento de la recaudación en vía ejecutiva se debe no sólo al incremento de la deuda susceptible de cobro, sino fundamentalmente al impulso que desde la Seguridad Social se ha dado al uso de medios telemáticos, así como a la intensificación de la colaboración con otras entidades públicas y privadas.
A este respecto, Trabajo destacó el Convenio de Colaboración entre la Tesorería General de la Seguridad Social y la Agencia Tributaria que mejora los convenios anteriores y permite el intercambio de información, lo que facilita que el importe recaudado por embargo de devoluciones tributarias hasta junio de 2010 ascienda a 34,6 millones de euros.
Además, en el primer semestre del año se practicaron 1.239.699 embargos, el 8,99% más que en el mismo periodo del pasado año.
Asimismo, durante los primeros seis meses de 2010 se analizaron 80.709 empresas, el 40% más, mientras que el número de empresas con primer descubierto que presentan deuda vigente fue de 1.357.
La Seguridad Social embargó más de 1,6 millones de cuentas en 2009
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12.08.2010 M. Tejo. Madrid 0
El cuerpo de la lucha antifraude de la Seguridad Social está más activo que nunca. El año pasado, el organismo público ingresó la cifra récord de 1.452 millones de euros por procedimientos de apremio, un 19,3% más respecto a la campaña de 2008.
Las nuevas tecnologías jugaron a su favor: gracias a un “complejo” cruce de ficheros con entidades financieras, pudo realizar 1.614.244 embargos de cuentas, lo que generó unos ingresos de 231,8 millones.
La estrecha relación de la Tesorería de la Seguridad Social con la banca –una de las novedades respecto a las actuaciones de ejercicios pasados– ha hecho posible que en sólo un año los ingresos por esta vía hayan crecido cerca de un 40%. Esta línea de trabajo se revela como una de las más importantes de cara a 2010. Tan sólo entre enero y mayo, las cuentas secuestradas han permitido aumentar los ingresos de la caja pública un 83%, hasta los 121,6 millones de euros. En 2006, la cifra apenas rozaba los 68 millones.
Pero el salto en la recaudación también se explica por la intensificación de las acciones para “derivar la responsabilidad por el pago de la deuda” a personas o empresas distintas de las inicialmente obligadas. Así, si una empresa está pendiente de cobrar facturas por parte de una segunda, la Seguridad Social le puede exigir a la compañía cliente que le redirija a ella las cantidades adeudadas.
El año pasado se emitieron 18.000 desviaciones, cinco mil más que hace un año, un cauce por el que se lograron recaudar 534 millones. Un procedimiento parecido es el que se usa en los embargos de devoluciones tributarias. En este caso, es el Fisco quien anula las cantidades que, por ejemplo, una persona iba a recibir de acuerdo a su Declaración de la Renta, para trasladar ese dinero a la Seguridad Social. Este método reembolsó a la Tesorería 91,4 millones, un 60% más que la campaña pasada.
Otra de las reglas que aplica la Seguridad Social para asegurar el cobro de la deuda es la adopción de medidas cautelares cuando existen “indicios racionales” de que el cobro se verá frustrado. Ante este escenario, el Estado puede confiscar propiedades a la supuesta empresa o particular morosos. Pues bien, el pasado año la Seguridad Social reforzó su prudencia y dictó 2.629 medidas cautelares, un 70% más.
En línea con estas operaciones, la Seguridad Social ha reforzado el control de medianas y grandes empresas para examinar su capacidad real de pago. Así, a 31 de mayo de 2010 había detectado 1.357 compañías con algún descubierto. La buena noticia, dice, es que el número de empresas que no pagan se sitúa en torno al 0,9%, cifra similar a otros años, pese a la crisis. También hay que destacar que el afán recaudatorio de la Seguridad Social permitió, no obstante, aplazar cuotas empresariales por valor de 287,2 millones, un 32% más.
Menos autónomos Parece que a la Seguridad Social no se le escapa ningún caso de morosidad, pero hay otros problemas para los que no ha encontrado una pócima curativa: la pérdida de afiliados y, por tanto, de ingresos. La sangría de destrucción de empleos afecta tanto a los trabajadores asalariados como a los que trabajan por cuenta propia.
De hecho, desde que comenzó la crisis el número de autónomos en España ha pasado de los 3.409.008 , en mayo de 2008, a los 3.143.001, en junio de 2010, lo que se traduce en 266.007 trabajadores por cuenta propia menos, un descenso del 7,8%. Esta lacra afecta a todas las comunidades, excepto a las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla, según recordaba ayer la Federación ATA.
¿Pero qué impacto tienen estas pérdidas sobre las cuentas de la Seguridad Social? En un año en el que la destrucción de empleo ha dominado la estadística del mercado laboral, el balance no es nada positivo. Cabe recordar que los autónomos tradicionalmente han cotizado por la base mínima. Así, según cifras de Trabajo, el 83,5% de los microempresarios contabilizados en el verano pasado no superaban el suelo mínimo de cotización, un patrón de comportamiento que se presume en la actualidad.
Según este escenario, por cada empleo autónomo el organismo público deja de percibir 841 euros al mes, más de 10.000 euros al año. Así, en los dos años centrales de la crisis (2008 y 2009), la Seguridad Social se habría visto privada de unos 532 millones de euros, más del doble de lo que cuesta abonar los permisos de paternidad de un año.
