Lunes, 17 de noviembre de 2008
Noticias generales
“La subjetividad tiene mucha relevancia con la nueva normativa contable”
Palma, 17 de noviembre de 2008
El profesor Juan José Páez disertó sobre la interpretación de los balances tras la reforma financiera
“Es una materia tan amplia que podríamos estar tres meses de charla. Al no poder estar este tiempo se decidió hacer esta ponencia con un nivel lo más entendible posible y para personas con o sin conocimiento contable”, señaló Juan José Páez, que fue presentado por el tesorero del colegio, Francisco Cabello, que dijo a los presentes que cada vez es más importante conocer y entender los balances económicos. “Su interpretación lleva a tomar decisiones a nivel judicial. Eso nos da a entender la importancia que tienen”, manifestó en la apertura de la conferencia el vicepresidente de los graduados.
“Con la adopción de 2003 por parte de la Unión Europea de las normas internacionales de contabilidad existía un modelo de dualismo contable, ya que los grupos cotizados venían aplicando el NIC mientras que para las cuentas individuales la normativa aplicable era la establecida por la legislación española a través de sus leyes mercantiles y del plan general de contabilidad”, explicó Páez como introducción, y añadió: “La existencia de este dualismo contable hacía imprescindible la necesidad de una reforma mercantil y contable que comenzó con la Ley 16/2007, de 4 de julio, y que ha finalizado con la aprobación del Real Decreto 1514/2007, de 16 de octubre, por el que se aprueba el Plan General de Contabilidad y del Real Decreto 1515/2007, de la misma fecha, por el que se aprueba el Plan General de Contabilidad de pequeñas y medianas empresas y los criterios específicos para microempresas”.
Este ponente, que en todo momento quiso que los presentes participaran con sus dudas y preguntas, dijo que la reforma es “muy profunda”. “Ahora se regulan con mucho más detalle operaciones tales como las realizadas con instrumentos financieros, se cambia la contabilización del impuesto sobre beneficios, se establecen nuevos criterios de valoración como el valor razonable, se exige más información en las transacciones entre partes vinculantes, ahora hay un Marco Conceptual con definiciones de los distintos elementos que conforman las cuentas anuales y, entre otros, se establece una diferente prevalencia de los principios contables”, indicó este experto financiero.
Juan José Páez fue realista e intentó concienciar a los presentes diciéndoles que la adecuación de la nueva normativa no será fácil, pero es necesaria. “Todos estos cambios exigirán un esfuerzo por parte de todos los que nos dedicamos de un modo u otro a la contabilidad. Se trata de una reforma de filosofía contable donde la fiabilidad y la relevancia constituyen los requisitos fundamentales que debe perseguir la información contable, de modo –prosigue este ponente- que la prudencia deja de ser el principio prevalente de la información financiera, para ser sustituido por el principio de imagen fiel”.
Los cambios más notables en la nueva normativa son muchos aunque Páez destacó: “Ahora se establece que, a efectos de presentación de las cuentas anuales que correspondan al primer ejercicio iniciado a partir de 1 de enero de 2008, las empresas tienen la obligación de elaborar un balance de apertura realizado con las normas establecidas en la Ley 16/2007. También establece la derogación del régimen simplificado de la contabilidad, regulado en el artículo 141 de la Ley de Sociedades de Responsabilidad Limitada y desarrollo por el Real Decreto 296/2004, de 20 de febrero, dada la escasa utilización que se hace del mismo”.
Juan José Páez, que confeccionó distintos balances en una pizarra para explicar mejor la reforma contable, dijo que ahora la “subjetividad tiene mucha revelacia con la nueva normativa”. “Este cambio ha supuesto que muchos de nosotros, los contables, nos hayamos tenido que reciclar e, incluso, algunos comenzar de cero”, opinó.
Para finalizar, Páez se refirió a que un balance se puede maquillar algunas veces según las circunstancias. “A veces te interesa hacer una bonita foto de tus cuentas para presentar a un banco o a una aseguradora para obtener una póliza. Puntualmente se puede hacer. Sin embargo, a 31 de diciembre todo tiene que ser real. Allí va nuestro trabajo y responsabilidad. Allí no tiene que haber ningún tipo de manipulación posible”, acabó.
