Viernes, 31 de julio de 2009
Noticias generales
Trabajo propone que 26.000 autónomos cobren el paro
Expansión
Cualquier sombra es buena para protegerse de la inclemencias económicas. Al menos, esto es lo que debió de pensar ayer el ministro de Trabajo tras la reunión que mantuvo con los interlocutores de los empresarios autónomos.
Tras el frustrado desenlace del diálogo social, Corbacho consiguió una codiciada foto de familia, junto con el presidente de ATA, Lorenzo Amor; de UPTA-UGT, Sebastián Reyna, y de CEAT-CEOE, Agustín González.
¿El motivo? Desvelar la propuesta del Gobierno para que los autónomos puedan cobrar el paro y que se elevará al Consejo de Ministros el 13 de agosto, si bien la ley definitiva no estará lista hasta final de año.
Trabajo propone una paga “voluntaria-obligatoria” para que estas personas cobren una prestación cuando, por motivos económicos pierdan su negocio. En la práctica, el anuncio estrella no es tan ambicioso ya que beneficiaría a 26.000 personas, según la memoria económica del borrador que ha podido consultar EXPANSIÓN.
La clave está en que la paga por cese de actividad se vincularía a las cotizaciones que los autónomos pagan por accidentes de trabajo y enfermedades profesionales (el tipo es del 1,5%). Como no todos los trabajadores cotizan por este capítulo, el universo de posibles beneficiarios se reduce al 12% del colectivo: alrededor de 365.000 casos. El resto podría elegir voluntariamente si comienza a cotizar por este epígrafe o no, en función de sus intereses.
Por añadido, y pese a que el ministro anunció ayer como un gran logro social esta prestación, existen importantes trabas para poder cobrarla, siempre según el borrador del anteproyecto de ley, por lo que ATA destacó ayer que en la reunión “no hubo unanimidad en los pareceres”. “Queremos una paga similar a la de los asalariados”, achacó Lorenzo Amor.
En primer lugar, habría que cotizar entre doce y diecisiete meses para cobrar durante dos la prestación. Y 36 meses o más para tener derecho a percibir seis mensualidades. El Gobierno garantiza que la cobertura no será inferior a los 580 euros y no superará los 1.300 euros.
Ahora bien, Trabajo matizó que la prestación equivaldría al 70% de la base de cotización de los autónomos, que se sitúa en los 900, con lo que los agraciados percibirán alrededor de 630 euros mensuales. Y otro matiz nada baladí: como requisito previo, los autónomos que quieran cobrar el paro tras cotizar el primer año deberán demostrar pérdidas equivalentes al 40% de sus ingresos.
Teniendo en cuenta estas cortapisas, Trabajo calcula que para 2011 –fecha en el que los primeros autónomos comenzarían a percibir sus prestaciones– se invertirán 64,9 millones de euros, cifra que se elevaría hasta los 77,4 millones el siguiente.
En paralelo, el ministro anunció que el Consejo de Ministros de hoy aprobará un real decreto con una bonificación del 50% en las cuotas para quienes contraten al primer asalariado.
También dará luz verde a que las mujeres de menos de 35 años y los hombres menores de 30 capitalicen hasta el 80% de su prestación por desempleo, frente al 60% actual, para invertirlo en un negocio.
Tras el frustrado desenlace del diálogo social, Corbacho consiguió una codiciada foto de familia, junto con el presidente de ATA, Lorenzo Amor; de UPTA-UGT, Sebastián Reyna, y de CEAT-CEOE, Agustín González.
¿El motivo? Desvelar la propuesta del Gobierno para que los autónomos puedan cobrar el paro y que se elevará al Consejo de Ministros el 13 de agosto, si bien la ley definitiva no estará lista hasta final de año.
Trabajo propone una paga “voluntaria-obligatoria” para que estas personas cobren una prestación cuando, por motivos económicos pierdan su negocio. En la práctica, el anuncio estrella no es tan ambicioso ya que beneficiaría a 26.000 personas, según la memoria económica del borrador que ha podido consultar EXPANSIÓN.
La clave está en que la paga por cese de actividad se vincularía a las cotizaciones que los autónomos pagan por accidentes de trabajo y enfermedades profesionales (el tipo es del 1,5%). Como no todos los trabajadores cotizan por este capítulo, el universo de posibles beneficiarios se reduce al 12% del colectivo: alrededor de 365.000 casos. El resto podría elegir voluntariamente si comienza a cotizar por este epígrafe o no, en función de sus intereses.
Por añadido, y pese a que el ministro anunció ayer como un gran logro social esta prestación, existen importantes trabas para poder cobrarla, siempre según el borrador del anteproyecto de ley, por lo que ATA destacó ayer que en la reunión “no hubo unanimidad en los pareceres”. “Queremos una paga similar a la de los asalariados”, achacó Lorenzo Amor.
En primer lugar, habría que cotizar entre doce y diecisiete meses para cobrar durante dos la prestación. Y 36 meses o más para tener derecho a percibir seis mensualidades. El Gobierno garantiza que la cobertura no será inferior a los 580 euros y no superará los 1.300 euros.
Ahora bien, Trabajo matizó que la prestación equivaldría al 70% de la base de cotización de los autónomos, que se sitúa en los 900, con lo que los agraciados percibirán alrededor de 630 euros mensuales. Y otro matiz nada baladí: como requisito previo, los autónomos que quieran cobrar el paro tras cotizar el primer año deberán demostrar pérdidas equivalentes al 40% de sus ingresos.
Teniendo en cuenta estas cortapisas, Trabajo calcula que para 2011 –fecha en el que los primeros autónomos comenzarían a percibir sus prestaciones– se invertirán 64,9 millones de euros, cifra que se elevaría hasta los 77,4 millones el siguiente.
En paralelo, el ministro anunció que el Consejo de Ministros de hoy aprobará un real decreto con una bonificación del 50% en las cuotas para quienes contraten al primer asalariado.
También dará luz verde a que las mujeres de menos de 35 años y los hombres menores de 30 capitalicen hasta el 80% de su prestación por desempleo, frente al 60% actual, para invertirlo en un negocio.
