Los precios subieron el 0,1% en septiembre y la tasa interanual aumentó tres décimas hasta situarse en el 2,1%, algo que no se alcanzaba desde noviembre de 2008, cuando el IPC se situó en el 2,4%. No obstante, dada la volatilidad que afecta a la subida, los expertos no descartan la vuelta a terreno negativo el próximo año.