Continuidad en materia de empleo y discurso más riguroso en inmigración. Esa es la impresión de los grupos políticos sobre las medidas anunciadas en el estreno del ministro de Trabajo e Inmigración, ayer, en Comisión en el Congreso de los Diputados. Entre las propuestas, Celestino Corbacho anunció que endurecerá las sanciones contra empresas que contraten extranjeros irregulares.
Las compañías derrochan este mes tiempo y dinero en asistencia a cursos para averiguar cómo se aplica el cheque en las nóminas de sus empleados. No todos los trabajadores notarán la medida porque se trata de una deducción máxima que se diluye a lo largo de los meses.
El Consejo de Ministros aprueba la deducción fiscal de 400 euros al año, que se prolongará hasta 2009. -De la Vega admite que hay dinero para todas las medidas previstas, pero no para más